Cártel de Sinaloa adquiere tecnología antidrones de guerra

El Cártel de Sinaloa se arma con tecnología militar antidrones ante vacío legal

Una facción del Cártel de Sinaloa, conocida como La Mayiza, ha escalado su capacidad tecnológica al adquirir sofisticados equipos de inhibición de drones, utilizados comúnmente en operaciones de guerra electrónica. Esta estrategia busca neutralizar los sistemas no tripulados del Ejército Mexicano, cada vez más utilizados en misiones de vigilancia, espionaje y despliegue de artefactos explosivos.

Según reveló el diario Milenio, al menos tres dispositivos de la firma Skyfend, especializada en tecnología antidrones, están ahora en poder de esta organización criminal. Se trata de equipos que combinan detección, suplantación de señal y neutralización de drones en tiempo real, con un alcance de hasta dos kilómetros. Aunque estos sistemas fueron diseñados para uso militar, su comercialización no está regulada en México, lo que ha sido aprovechado por grupos como La Mayiza.

Los tres dispositivos clave en manos del narco

La tecnología en posesión del cártel está compuesta por:

• Skyfend Hunter: Un arma portátil que detecta y desactiva drones. Su precio en el mercado internacional ronda los 100,000 dólares.

• Skyfend Spooter: Dispositivo capaz de suplantar el control de drones enemigos, tomando control de ellos en un radio de dos kilómetros.

• Skyfend Guider: Una consola tipo tableta que permite monitorear en tiempo real y operar los otros dos equipos desde cualquier lugar.

Este arsenal permite a La Mayiza establecer zonas libres de vigilancia aérea, proteger sus rutas de trasiego y asegurar zonas de operación frente a intervenciones militares. La adquisición de este tipo de tecnología marca un punto de inflexión en la capacidad operativa de los cárteles mexicanos.

Respuesta militar y vacío legal

La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha respondido con la compra de nuevos drones tácticos para fortalecer su capacidad aérea, pero la carrera tecnológica con el crimen organizado parece no tener freno. Mientras tanto, el Senado mexicano mantiene congelada una iniciativa legislativa para regular la venta y compra de drones y sistemas asociados.

La propuesta busca limitar el acceso de organizaciones criminales a estas herramientas y establecer mecanismos de seguimiento sobre el uso y destino de la tecnología antidrones en el país.

El acceso libre a tecnología de guerra electrónica por parte de grupos criminales plantea serias preocupaciones de seguridad nacional. La falta de legislación permite que México se convierta en un mercado gris para este tipo de herramientas, mientras el crimen organizado multiplica su poder frente al Estado.